Supuestos Gestión de la Administración Civil del Estado (A2) – OEP 2025
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Si estás preparando oposiciones para el cuerpo de Administrativo del Estado, Auxiliar Administrativo del Estado o te interesa trabajar en la Gestión del Estado, seguro que te has topado con términos complejos en el ámbito de la contratación pública. Uno de ellos es el contrato SARA. Hoy, vamos a explicar de manera clara qué es un contrato SARA, en qué casos se aplica y cómo afecta a la administración pública.
Este blog está pensado para ayudarte a comprender este concepto de manera sencilla y eficaz, especialmente si estás estudiando en alguna academia online de oposiciones. ¡Comencemos!
Los contratos SARA son aquellos contratos sujetos a regulación armonizada. En términos simples, son contratos públicos que, debido a su importancia económica, están regulados por normas comunes de la Unión Europea. Estas normas buscan asegurar la transparencia, la libre competencia y la igualdad de trato en la adjudicación de contratos públicos entre los Estados miembros.
El término «SARA» proviene de las siglas en español de «Sujeto a Regulación Armonizada». Esto significa que los contratos SARA se rigen no solo por la legislación nacional, sino también por la normativa europea, en especial la Directiva 2014/24/UE sobre contratación pública, transpuesta en la legislación española a través de la Ley 9/2017 de Contratos del Sector Público (LCSP).
La Unión Europea busca evitar el proteccionismo nacional, donde un Estado favorezca a empresas locales frente a competidores extranjeros. Con los contratos SARA, se aseguran unos procedimientos justos y transparentes que garanticen la igualdad de condiciones para todas las empresas interesadas en participar en un contrato público, independientemente del país de origen dentro de la UE.
El marco legal en España que regula estos contratos se encuentra principalmente en la Ley 9/2017, específicamente en los artículos que mencionan los umbrales y procedimientos a seguir para la adjudicación de contratos públicos.
Dentro de la Ley de Contratos del Sector Público, se establecen diferentes tipos de contratos SARA en función de su naturaleza. Los principales tipos de contratos que pueden estar sujetos a regulación armonizada son:
Cada uno de estos contratos tiene umbrales específicos a partir de los cuales se considera un contrato SARA, los cuales veremos en detalle más adelante. Estos umbrales son importantes porque determinan cuándo un contrato debe cumplir con la normativa europea.
Los umbrales de los contratos SARA
Para que un contrato se considere Sujeto a Regulación Armonizada, debe superar unos umbrales económicos establecidos tanto por la normativa europea como por la ley española. Estos umbrales se revisan periódicamente y dependen del tipo de contrato del que se trate. A continuación, te mostramos los umbrales actuales, aplicables en 2024 según la normativa europea:
Por ejemplo, si una administración pública quiere contratar la construcción de una carretera que costará más de 5,6 millones de euros, ese contrato estará sujeto a regulación armonizada. Lo mismo ocurre si la contratación es para el suministro de material o servicios por un valor superior a 143.000 euros.
Cuando un contrato supera los umbrales establecidos, la administración pública debe seguir unos procedimientos específicos para adjudicar ese contrato. Estos procedimientos están diseñados para garantizar que haya igualdad de oportunidades y que las empresas de cualquier Estado miembro de la Unión Europea puedan competir en igualdad de condiciones.
Este es el más común en los contratos SARA. En el procedimiento abierto, cualquier empresa puede presentar una oferta, y la administración evaluará todas las propuestas sin limitar el número de licitadores. La idea es fomentar la libre competencia. Este procedimiento es particularmente importante en oposiciones relacionadas con la Gestión del Estado, ya que es el más transparente y abierto.
En el procedimiento restringido, solo pueden presentar oferta las empresas que hayan sido previamente seleccionadas por la administración pública. En este caso, se realiza una preselección basada en criterios objetivos, como la solvencia técnica o económica de los licitadores. Una vez seleccionadas, solo esas empresas pueden competir por el contrato.
Este procedimiento es menos común, pero también se utiliza en algunos contratos SARA. Consiste en que la administración pública negocia directamente con las empresas interesadas después de una fase de publicidad y selección inicial. Sin embargo, este procedimiento solo se utiliza en casos excepcionales, como cuando el contrato es especialmente complejo o hay dificultades técnicas.
El diálogo competitivo es un procedimiento más complejo, utilizado en casos donde la administración no tiene una idea clara de la solución que necesita y busca ideas innovadoras por parte de las empresas. Es una opción útil cuando los proyectos son muy técnicos y requieren soluciones que no están completamente definidas en el momento de la licitación.
Uno de los aspectos clave de los contratos SARA es la publicación. Dado que están sujetos a regulación armonizada, estos contratos deben ser publicados en el Diario Oficial de la Unión Europea (DOUE), asegurando que cualquier empresa dentro del territorio de la UE tenga acceso a la información sobre la licitación.
Además, la transparencia es uno de los principios fundamentales de los contratos SARA. Esto implica que toda la documentación relacionada con el proceso de licitación debe estar disponible para los licitadores, y el proceso de adjudicación debe seguir criterios claros y objetivos. Esta transparencia es especialmente relevante si estás estudiando para oposiciones en cuerpos administrativos, ya que conocer y aplicar estos principios es fundamental en la gestión pública.
Imagina que el Ministerio de Fomento decide construir una nueva autopista en una región de España. El coste estimado del proyecto es de 6 millones de euros, lo que lo sitúa por encima del umbral para los contratos de obras. En este caso, el contrato estará sujeto a regulación armonizada, y el Ministerio deberá publicarlo en el DOUE, asegurando que empresas de toda la UE puedan presentar sus ofertas.
Además, el procedimiento a seguir será probablemente un procedimiento abierto, lo que garantiza que cualquier empresa que cumpla con los requisitos establecidos pueda participar en la licitación.
Supongamos que una consejería de salud en una comunidad autónoma necesita adquirir equipos médicos por un valor de 500.000 euros. Dado que este importe supera el umbral de 215.000 euros para contratos de suministros, la licitación deberá seguir la normativa de los contratos SARA. Esto implicará que se publicará en el DOUE y se seguirán los procedimientos establecidos por la ley para asegurar una adjudicación justa y competitiva.
A primera vista, los contratos SARA pueden parecer similares a los contratos públicos ordinarios, pero existen diferencias clave que debes conocer, especialmente si te preparas para una oposición en el ámbito de la administración pública.
La principal diferencia es la publicidad internacional. Mientras que los contratos no SARA solo se publican en los boletines oficiales nacionales o autonómicos (como el BOE o los boletines de comunidades autónomas), los contratos SARA deben publicarse en el DOUE. Esto asegura que empresas de toda la UE puedan acceder a la información y participar en la licitación.
Los contratos SARA tienen procedimientos más estrictos en cuanto a la transparencia y la igualdad de trato. Las empresas que participan en una licitación SARA deben cumplir requisitos más rigurosos en cuanto a solvencia económica y técnica, lo que garantiza que solo los licitadores más capacitados puedan competir.
Dado que los contratos SARA están sujetos a regulación armonizada, las instituciones europeas tienen un mayor control sobre estos contratos. Esto incluye la posibilidad de impugnar los procesos de adjudicación si no cumplen con las directivas europeas, lo que añade una capa extra de supervisión.
Si estás preparando oposiciones para trabajar en la Gestión del Estado, es fundamental que comprendas la importancia de los contratos SARA. Estos contratos representan una parte significativa del gasto público en infraestructuras, servicios y suministros, y su correcta gestión es crucial para garantizar la transparencia y eficiencia en el uso de los fondos públicos.
En el ámbito de la Gestión del Estado, uno de los principales objetivos es asegurar que las administraciones públicas utilicen sus recursos de manera eficiente y transparente. Esto incluye la correcta aplicación de la normativa sobre contratación pública, especialmente en los contratos SARA, que están sujetos a un mayor control debido a su impacto económico.
Si estás preparándote en una academia online de oposiciones para ser Administrativo del Estado, Auxiliar Administrativo del Estado o te interesa la Gestión del Estado, conocer los contratos SARA es fundamental. Estos contratos son una pieza clave en la contratación pública, y comprender su funcionamiento es crucial para cualquiera que aspire a trabajar en la administración.
Además, los contratos SARA se mencionan frecuentemente en los temarios de oposiciones relacionadas con la administración pública, ya que son un elemento esencial para garantizar el buen uso de los recursos públicos.
Esperamos que este artículo te haya ayudado a comprender de manera clara y sencilla qué es un contrato SARA y cómo funciona en la práctica. ¡No dudes en volver a consultarlo mientras sigues con tu preparación para las oposiciones!
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